Dinero que salva bancos y sistemas, que aunque no lo haya se encuentra, y que se esconde entre las mentes de los actores del sistema cuando hay que hacer frente al hambre de miles. Excusas que bien dichas parecen verdades y curan los errores, mentes que desesperadas beben de las fuentes de desinformación y manipulación del conocimiento. Diario es el martilleo de los pretendidos elocuentes conductores del tren que no tiene parada en la vergüenza. Y entre tanto.... nosotros.
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